Grup XXI 'despega' con la aerolínea Corporate Jetsbarcelona. Si usted es un directivo o un particular que dispone de un mínimo de 3.500 euros por cada hora que le lleven en avión a una cita obligada o por placer tiene un "aerotaxi" para desplazarse. Y todo reservando con sólo dos horas de antelación podrá salir del aeropuerto de El Prat en Barcelona hacia cualquier lugar del mundo. Bueno, hacia un lugar que no supere las 11 horas de vuelo. Un vuelo a Madrid puede costar 6.000 euros ida y vuelta desde Barcelona. "Vender tiempo" es lo que Grup XXI -grupo catalán dedicado a los negocios del automóvil, hostelería, medicina e inmobiliaria y ahora al del negocio de la aviación privada- ofrece desde El Prat. Ha invertido 30 millones en su línea aérea de negocio que estará controlada por la marca Corporate Jets XXI. El consejero delegado de la aerolínea, Santiago Vila, pidió al gestor aeroportuario AENA que agilice "la construcción de un hangar en la nueva Terminal D para aviones privados en aeropuerto de El Prat para mantener los aviones de las siete aerolíneas privadas que operan ya en Barcelona". Corporate Jets XXI empezó a operar el pasado mes de abril y cuenta con dos aviones de segunda mano debido a que los fabricantes estadounidenses y el francés Dassault tardan más de dos años en entregar los pedidos nuevos. Uno de los aparatos cubre las rutas europeas y del norte de África (un Cessna Citation XLS con capacidad para ocho pasajeros) y otro con autonomía para llegar a Oriente Medio, la costa este de Estados Unidos, Latinoamérica y el centro de África sin escalas (un Falcon 900 C de Dassault, con capacidad para 14 pasajeros). Corporate Jets XXI, propiedad en un 80 por ciento de Grup XXI y en un 20 por ciento del aviador Eugeni Soriano, incorporará otro Falcon 900 EX de ocasión a finales de este año. Para su compra, ampliará capital en seis millones. La empresa prevé facturar 3,4 millones este año.