madrid. El consumo de cemento cayó un 16,6 por ciento en los cinco primeros meses del año si se compara con el mismo periodo de 2009, hasta situarse en 9,62 millones de toneladas, como consecuencia del parón de la construcción, sobre todo residencial, según asegura la patronal cementera Oficemen. El mercado de este material mantiene la tendencia de descensos que registró en los dos últimos años aunque en los primeros meses de 2010 se vio también afectado por las condiciones meteorológicas en el desarrollo de las obras en marcha. En cuanto al pasado mes de mayo, el sector de la construcción absorbió 2,19 millones de toneladas de cemento, un 11 por ciento menos, con lo que se mantiene así la desaceleración de la caída respecto al desplome del 18 por ciento de registrado en marzo. Según los datos hecho públicos por Oficemen, el descenso del mercado doméstico está siendo en parte compensado "con un mayor ritmo exportador". Así, entre los meses de enero y mayo, las exportaciones de cemento y clinker crecieron un 28 por ciento, hasta los 1,51 millones de toneladas.