Barcelona. El grupo Cirsa, propiedad de la familia Lao, ha cedido a las presiones del gobierno argentino y ha alcanzado un acuerdo con el empresario local Cristóbal López para cederle el 50 por ciento del negocio de los dos barcos casino anclados en el puerto de Buenos Aires. Cirsa conserva la propiedad y las licencias de juego, pero ha creado una unión temporal de empresas con López en la que le cede la mitad del negocio. A cambio López y otro socio aportarán 120 millones de dólares para comprar un nuevo barco casino. En paralelo, Cirsa ha adquirido el 50% por ciento del casino de la ciudad argentina de Rosario por lo que pagará 20 millones.