Los miembros de la UE establecen un nivel de tarifas preliminarbruselas. El reglamento que obligará a las compañías de telecomunicaciones a rebajar el coste de las llamadas de teléfono móvil desde el extranjero empieza a tener el camino despejado. Los negociadores de la Presidencia alemana de la UE y del Parlamento Europeo alcanzaron ayer un principio de acuerdo, tras cuatro rondas de discusión, con el establecimiento de un nivel de tarifas intermedio respecto a lo que inicialmente pedía cada institución. Si los gobiernos de la UE y el pleno de la cámara aceptan el compromiso, las llamadas que realice un consumidor desde el extranjero tendrán este mismo año un coste máximo de 49 céntimos por minuto, sin IVA, y de 24 céntimos las recibidas. El compromiso fija también una reducción gradual de estas tarifas para los dos próximos ejercicios: hasta los 46 y 43 céntimos en 2008 y 2009 en el caso de las llamadas realizadas desde el extranjero y hasta los 22 y 26 céntimos las llamadas recibidas. Asimismo, el acuerdo sitúa en 30 céntimos el coste máximo de la tarifa mayorista, la que cobrarán las operadoras de cada país a los operadores de otros Estados miembros cuando sus usuarios utilicen su red. Este montante se verá reducido hasta los 28 céntimos en 2008 y los 26 en 2009.Desde que la comisaria Viviane Reding presentara su polémica propuesta, numerosas compañías han reaccionado en contra de la medida por su carácter intervencionista. Según el acuerdo, los operadores de telefonía móvil estarán obligados a informar a sus clientes de las tarifas del "roaming" un mes después de la publicación del reglamento. Los clientes particulares podrán optar, pero si no lo hacen en tres meses quedarán sujetos automáticamente a la eurotarifa. En el caso de los mayoristas, el reglamento se aplicará dos meses después de la entrada en vigor, previsiblemente después del verano.