Fernández se opone a que se eliminen los blindajes y señala que para proteger a los pequeños accionistas están las opasbilbao. El presidente de BBK, Mario Fernández, desveló ayer su claro y total respaldo a Ignacio Sánchez Galán en su particular enfrentamiento con Florentino Pérez. Una vez más, en las semanas previas a la junta de accionista (26 de marzo), trata de acceder al consejo de administración de Iberdrola basándose en que ACS controla cerca de un 12 por ciento del capital del grupo eléctrico. En declaraciones a Onda Vasca, Fernández manifestó que está "rotunda y absolutamente en contra" de la reforma legal que propugna la eliminación de las limitaciones de los derechos de voto en las sociedades cotizadas, como ocurre con Iberdrola en que dichos derechos tienen como tope el equivalente al 10 por ciento del capital. El presidente de BBK, entidad que controla un 7 por ciento de Iberdrola, recalca que cuando se quiere controlar una sociedad el mecanismo legal es la presentación de una opa (oferta pública de adquisición) para todos los accionistas. De ahí que, "buscar esquemas de control con disfraces de lagarterana más o menos vistosos y de colores es un tema que no contará nunca con nuestro apoyo". Insistió en que prácticamente todos los países de Europa permiten las limitaciones al derecho de voto, que "a quienes más benefician son a los accionistas minoritarios", a los pequeños ahorradores que invierten en bolsa. Recalcó además que "cuando se instrumenta un control a través de un procedimiento no de opa estos accionistas no tienen ningún derecho". Por tanto, sin ambages, aseguró que eliminar el blindaje en Iberdrola "desde el punto de vista técnico me parece que es un error" y al mismo tiempo también "contrario a los intereses de Euskadi" y por tanto, recalcó, "contrario a los intereses de la BBK". Las tesis defendidas por Mario Fernández, que el pasado miércoles coincidió con Ignacio Sánchez Galán con motivo de la primera reunión del Consejo Económico Asesor del lehendakari Patxi López, chocan de pleno con las declaraciones que el jueves hiciera el vicepresidente primero de Banca March, Pablo Vallbona, banco que controla el 23,5 por ciento de ACS, constructora que aboga por la eliminación de los blindajes en el grupo eléctrico, al asegurar que "el bloqueo perjudica al pequeño accionista porque impide mejoras de oferta". Por ahora, ni Bancaja ni La Caixa han hecho público su parecer sobre el debate respecto de las fórmulas de control accionarial.