La entidad y la aseguradora tuvieron que inyectar 115 millones para fortalecer su capital a finales del año pasadomadrid. La financiera que comparten Caja Madrid y Mapfre no pasa por sus mejores momentos. La entidad entró el año pasado en números rojos como consecuencia de las pérdidas de deterioro de activos debido a la subida de la morosidad. El agujero registrado por Banco de Servicios Financieros Caja Madrid Mapfre alcanzó los 99,95 millones de euros. Esta situación obligo a ambos socios a inyectar en otoño 115 millones de euros, con el objetivo de recapitalizar la sociedad que se dedica principalmente a conceder créditos de consumo. La entidad madrileña aportó entonces 59 millones, mientras que los restantes 56 millones fueron suministrados por la aseguradoras, en función de la participación accionarial (49 y 51 por ciento, respectivamente). La financiera se anotó unas pérdidas por deterioro de préstamos por valor de 117,3 millones de euros, hecho que la llevó a los números rojos. En 2008, aún ganaba dinero, menos de un millón de euros, pero las dificultades de los españoles para hacer frente a los pagos ha disparado la morosidad en el sector del consumo. Las insolvencias son mayores en este segmento de actividad. Según datos del Banco de España la tasa de impagos asciende a casi el 10 por ciento, el doble que el conjunto de créditos del sistema financiero. Los mayores números rojos Banco de Servicios es una de las sociedades que comparten la entidad y la aseguradora, fruto de su alianza comercial y estratégica. La filial financiera es uno de los principales quebraderos de cabeza para Mapfre, ya que es una de las franquicias que más pérdidas le genera y una de las pocas en números rojos. La compañía que preside José Manuel Martínez comparte con otras entidades joint venture. Así, por ejemplo, la gestora de bancaseguros conjunta con Caja Duero genera beneficios de 8,7 millones de euros o con Caja Castilla-La Mancha (CCM) registra ganancias superiores a los 12 millones, según el informe anual de Mapfre. En el caso de esta última los resultados se multiplicaron por tres con respecto al ejercicio de 2008, a pesar de la intervención de la manchega el pasado mes de marzo. La alianza con Caja Duero es más reciente y, por tanto, todavía no ha madurado del todo. La joint venture con la entidad castellanoleonesa data de mediados del año 2008.