Aún no ha comunicado a las autoridades el cierre de la plantamadrid. Tras los intensos movimientos políticos y sociales ocurridos ayer entorno al cierre de la planta de Delphi en Puerto Real, la pelota se encuentra ahora mismo en el tejado de la compañía: aún no ha remitido a las autoridades, como exige la ley, el expediente de cierre que además, como recuerda la Junta de Andalucía, debe ir acompañado de un plan social cuando una empresa supera los 50 trabajadores. Además, sigue sin designar un interlocutor con el que puedan negociar los agentes sociales.El Gobierno se ha sumado a la exigencia de la Junta de Andalucía, sindicatos y trabajadores de que la compañía se ajuste a la ley, y entonces se decidirán las medidas que se van a tomar. Los sindicatos están ahora mismo a la expectativa ante los movimientos de la Adminstración. aunque ayer no había una fecha cerrada, el Ministerio de Industria quiere reunirse esta misma semana con la Junta de Andalucía para ver qué decisiones toman.Aunque a la espera, Comisiones Obreras se reunió ayer para analizar por un lado la situación de Delphi en España y por otro la de la planta de Puerto Real, de la que destacan que arrastra problemas desde 2001: pérdidas de 150 millones de euros y tres regulaciones de empleo.La matriz pierde un 129% másDelphi Corporation, la matriz del fabricante de componentes en Estados Unidos, multiplicó por más de dos sus pérdidas en el ejercicio 2006: 4.152 millones de euros, un 129 por ciento más de lo que había perdido sólo un año antes, según los resultados que presentó ayer.La factura que más cargó las cuentas de la multinacional fue la de su reestructuración en Norteamérica, que supuso una carga de 2.265 millones de euros. El gasto se produjo sobre todo en el plan de bajas incentivadas a 20.000 empleados.