La compañía Atersa electrifica con energía de origen solar zonas rurales deprimidas de África y Latinoaméricavalencia. Una de las grandes aplicaciones que tiene la energía solar fotovoltaica es la posibilidad de generar electricidad donde no existe porque no llega la red, y los países del tercer mundo no andan sobrados de este preciado recurso. Atersa, uno de los principales productores españoles de energía fotovoltaica, ha llevado en los últimos años los paneles solares que fabrica a zonas rurales de Senegal, Costa de Marfil, Benín, Mongolia o Bolivia, y gracias a sus instalaciones varios poblados de estos países cuentan con un suministro regular de electricidad. Este mismo año acometerá un importante proyecto en Burkina Faso (África), que contempla la instalación trescientas farolas que se alimentarán con energía solar y la electrificación con paneles de cincuenta maternidades, otros tantos dispensarios médicos y cincuenta escuelas. Además, generará electricidad en 150 centros administrativos y en cincuenta centros sociales de diferentes poblados del país. La inversión asciende a cuatro millones de euros y será financiada con fondos de ayudas al desarrollo del gobierno español. No es la primera actuación de Atersa en Burkina Faso, ya que con anterioridad la empresa montó en este país otras 1.500 farolas con módulos fotovoltaicos. Otros proyectos en los que ha participado la firma valenciana son la instalación de 2.500 farolas en Senegal, la electrificación de dispensarios médicos en Benín o la instalación de paneles solares en poblados de Mongolia, entre otros. Todas estas iniciativas han sido financiadas por la Agencia Española de Cooperación Internacional, la ONU o diferentes ONG. "Realmente se cambia la vida a esa gente ya que muchos no habían visto nunca la luz artificial. La idea es llegar a la mayoría de la población y por eso se actúa en escuelas y centros de salud. En estos últimos es fundamental contar con un frigorífico para conservar los medicamentos", explica a elEconomista Enrique Alcor, director comercial de Atersa.Pero Atersa, propiedad del grupo Elecnor, tiene más proyectos en cartera, como la construcción de los dos mayores parques solares fotovoltaicos de Europa, que se levantarán en España. La firma, con fábrica en la localidad valenciana de Catarroja, suministrará los más de 240.000 módulos solares con los que contarán estos parques que se ubicarán en Murcia y Cáceres. Cada uno tendrá una potencia de veinte megavatios. Tercer productorAtersa, que ocupa el tercer puesto en el ranking español de productores de placas fotovoltaicas, facturó el año pasado 77 millones de euros y para este año tiene previsto triplicar casi sus ventas, hasta alcanzar los 220 millones, lo que "nos colocaría los primeros del sector en cuanto a facturación", según Enrique Alcor. Este responsable de la firma asegura que "ya están superados" los delicados momentos que atravesó la compañía hace apenas dos años, cuando la norteamericana Astropower, por entonces su propietaria, se declaró en quiebra. Elecnor acudió al rescate de la firma valenciana y la compró por casi 26 millones de euros.