MDI, con sede en Niza y accionistas españoles, lleva 12 años apostando por esta tecnologíabarcelona. Tener una idea, creer en ella, tener mucho tesón y no desfallecer. Esa es la fórmula que siguió la empresa francesa MDI cuando decidió desarrollar un motor para automóviles que funciona con aire comprimido.Durante más de una década, los principales accionistas de la compañía, Guy Negre y su hijo Cyril Negre, han desarrollado la tecnología, la han mejorado, han diseñado coches y han buscado inversores dispuestos a construir una fábrica donde producir los turismos en serie. Los grandes fabricantes del sector les han escuchado, pero siempre les han dado la espalda.Sin embargo, esta semana las cosas han cambiado, el fabricante de coches indio Tata Motors ha firmado una acuerdo con MDI para el desarrollo industrial del motor y el diseño de coches impulsados por aire comprimido. En principio, el acuerdo firmado en Bombay (India) autoriza a Tata para usar esta tecnología en exclusiva para el mercado indio, pero no podrá realizar exportaciones ya que hasta ahora MDI ha seguido una estrategia de conceder licencias por países para la fabricación y comercialización de sus vehículos. MDI está dirigida por Guy Negre que fundó la compañía en los años 90 en búsqueda de su sueño: desarrollar un motor que sólo usa aire comprimido como combustible, una tecnología pensada para respetar el medio ambiente.Según Negre, "MDI está muy feliz de concluir este acuerdo con Tata Motors para trabajar juntos con el objetivo de desarrollar una tecnología a bajo costo". La empresa francesa, que cuenta con diversos accionistas españoles, continuará con su sistema de licencias para fábricas de coches en otros países.MDI es una compañía familiar con sede en Carros, cerca de Niza, al sur de Francia. Tata Motors es la compañía automotriz más grande de India, con unas ventas de 5.500 millones de dólares (4.230 millones de euros) en el ejercicio 2005-2006. También es la quinta compañía mundial productora de camiones medianos y pesados. Los coches, autobuses y camiones están comercializados en varios países de Europa, África, Medio Oriente, Asia y Australia.Tata, que mantiene un acuerdo industrial con Fiat, es la propietaria del 21 por ciento del capital de Hispano Carrocera, empresa española dedicada a la fabricación de carrocerías de autocares. La compañía cuenta con centros de I+D en India, Reino Unido y Corea del Sur.