La planta de Almussafes fabricará el 'C-MAX' para toda Europa y un nuevo motorvalencia / madrid. Ford Europa aclaró ayer el futuro a medio plazo de la planta de Almussafes (Valencia), que producirá dos modelos de vehículos -Fiesta y C-MAX- con dos turnos de trabajo y, lo que es más importante, con menos plantilla. Lo que empezó como una buena noticia, la confirmación de un nuevo modelo y un nuevo motor para la factoría, se reveló en pocas horas como una reorganización que puede acabar con un millar de personas en la calle. El presidente de Ford Europa, John Fleming, anunció a primera hora de la mañana que la factoría valenciana fabricará el nuevo modelo de monovolumen C-MAX de cinco y siete plazas "para todos los mercados europeos y potencialmente para otros mercados de fuera de Europa" a partir de finales de 2010, como ya se anunció el pasado mes de marzo. Sin embargo, Almussafes dejará de producir el superventas Focus cuando salga la nueva versión de este modelo en 2011. Aunque en marzo se contemplaba la posibilidad de mantenerlo en la planta valenciana, además de en Saarlouis (Alemania), Ford ha decidido finalmente, "por motivos estratégicos", según Fleming, concentrar la producción del Focus en Alemania y la del C-MAX en España, mientras la del Fiesta se mantendrá repartida entre Colonia y Almussafes. Durante unos meses, entre otoño de 2010 y primavera de 2011, se fabricarán en Valencia el Fiesta, el nuevo C-MAX y el actual Focus. John Fleming, que el martes se reunió con los ministros de Economía, Elena Salgado, e Industria, Miguel Sebastián, para adelantarles la decisión, confirmó también que Almussafes fabricará a partir de 2010 el nuevo motor de dos litros de inyección directa Ecoboost. Jarro de agua fría Casi al mismo tiempo que el presidente de Ford Europa hacía este anuncio, la dirección de la factoría española reunió a los representantes sindicales para comunicarles la eliminación definitiva del tercer turno, suspendido desde mayo mediante un expediente de regulación de empleo (ERE) temporal, y el consiguiente recorte de plantilla. La compañía no especificó a cuántas personas afectará el recorte, que comenzará este año. Ford España tiene una plantilla de 7.097 empleados, de los que 6.700 trabajan en Almussafes. En una nota a los trabajadores de la planta, la Dirección adujo que las "condiciones deprimidas" de los mercados y las demandas futuras esperadas hacen prever que la factoría de Valencia "no vuelva a tres turnos completos de producción". Un portavoz de la factoría manifestó a elEconomista que el ERE de extinción de contratos "no tiene nada que ver" con la retirada del Focus, sino con el tercer turno. Según explicó, "el tercer turno ya no es viable con los volúmenes actuales" y no lo va a ser a medio plazo "porque se habla de una caída de la producción cuando se acaben las ayudas de los gobiernos europeos". Fuentes sindicales indicaron a elEconomista que el impacto del excedente de la plantilla puede ser importante: "Teniendo en cuenta que estaba prevista una suspensión del tercer turno que afectaba a 1.100 trabajadores -explicaron- es razonable que se estén barajando cifras similares en el caso de un ERE de extinción". Efectivamente, el ERE temporal por la suspensión del turno de noche se aprobó el 4 de mayo, hasta diciembre, para un máximo de 1.100 trabajadores, aunque debido al aumento de demanda del Fiesta en mayo y junio y la necesidad de reforzar los otros dos turnos no llegó a afectar a más de 700 en ningún momento. Por ello, el Gobierno valenciano rebajó este martes el alcance del ERE temporal a un máximo de 294 trabajadores. Más optimista, el portavoz de UGT en Almussafes, Gonzalo Pino, confiaba ayer en que los despedidos no fueran tantos, porque cada C-MAX fabricado necesita dos horas más de trabajo que un Focus. Pino explicó a elEconomista que el nuevo motor elevará la producción de 250.000 a 450.000 unidades al año, aunque no absorberá mucho personal, ya que la planta está muy automatizada. El portavoz de CCOO en la factoría, Miquel Rosaleny, afirmó que los anuncios de ayer suponen "un golpe industrial" y añadió que su sindicato no aceptará ninguna extinción "traumática" de empleo en Ford, sobre todo teniendo en cuenta que esta multinacional recibe ayudas económicas. La Comisión Europea autorizó el pasado 18 de junio una ayuda de 51,9 millones de euros que España ha concedido a Ford para inversiones en la planta de Almussafes. El Gobierno valenciano reaccionó con satisfacción al anuncio de la llegada del C-MAX y el nuevo motor, "que garantizan la estabilidad en la planta", y no comentó el anuncio de recorte de personal.