roma. La autoridad italiana para la Defensa de la Competencia dio ayer el visto bueno a la fusión entre Banca Intesa y San Paolo-Imi, pero condicionado a que las dos entidades bancarias se desprendan de 748 ventanillas de atención al cliente, según Efe. Además de estacesión, Competencia también exige que se disuelva la empresa de riesgos compartidos Caam, creada por Intesa y la francesa Credit Agricole. En seguros, las pólizas Intesa Vita y Generali no podrán ser comercializadas a través de las oficinas San Paolo y las de Eurizon Vita no serán vendidas en las oficinas que antes de la fusión pertenecían a Intesa.