Piden aumentar la tasa mínima del 20 por ciento para no vender por debajo de dos eurosMADRID. ¿Se imagina a alguien que pida a Hacienda que le suban los impuestos? Puede parecer sorprendente, pero no lo es. Las tabacaleras quieren que el Gobierno suba la carga fiscal mínima que se aplica a los cigarrillos. Su objetivo, sin embargo, no es engordar las arcas del Estado, sino impedir que se vendan en España cajetillas por menos de dos euros e incrementar así sus márgenes. Los fumadores pueden encontrar todavía en los estancos marcas como American House por 1,25 euros, Matrix por 1,50 y Burton por 1,60.A comienzos de año, el Ejecutivo fijó un impuesto mínimo de 55 euros por cada mil cigarrillos para frenar la proliferación de las marcas baratas, pero a las grandes empresas del sector no le parece suficiente. "Se trata de una simple cuestión matemática. Si lo que pretende es que no se vendan cajetillas por debajo de dos euros, hay que fijar un impuesto mínimo de entre 66 y 70 euros", asegura un directivo del sector, que prefiere mantener el anonimato. En su opinión, "si el Gobierno no reacciona, se seguirán vendiendo tabaco por 1,65 euros y España seguirá teniendo los precios más bajos de la Unión Europea".Actualmente, cada cajetilla paga como mínimo 1,10 euros a Hacienda y las grandes tabacaleras quieren que ese importe se eleve, al menos, hasta 1,32 euros. La subida de los impuestos mínimos beneficiaría, sobre todo, a Altadis, la dueña de Fortuna y Ducados, y a Philip Morris, propietaria de Marlboro y Chesterfield. Ninguna de las dos quiere pronunciarse al respecto, pero sus cifras no dejan lugar a dudas. Son las mayores empresas del mercado y las que más han sufrido, por lo tanto, el avance del tabaco barato. A Altadis, la caída de los márgenes le ha dejado, además, en una situación muy complicada, al borde de una opa por parte de la británica Imperial Tobacco.Los márgenes más bajosLa rentabilidad de la industria tabacalera española es la más baja de toda la Unión Europea, según los datos que maneja Bruselas. Las empresas ganan sólo 0,49 euros por cada cajetilla, la mitad prácticamente que la media y tres veces menos que países como Reino Unido, Irlanda o Suecia. A pesar de las últimas subidas de impuestos, los precios del tabaco siguen siendo los más baratos de toda la Unión Europea y desde julio del año pasado han caído, además, un 20 por ciento. En el Gobierno, el ministerio de Sanidad ve con buenos ojos una nueva subida de las tasas fiscales, aunque la última palabra la tiene Hacienda.