El Gobierno español enviará la información a Bruselas después del 23 de marzomadrid. La situación entre el Gobierno español y la UE va siendo cada vez más tensa. El principal motivo son las explicaciones que ha pedido Bruselas a España sobre las nuevas funciones adquiridas por la Comisión Nacional de la Energía (CNE), que permitirán a este organismo analizar la oferta de E.ON para comprar Endesa. La Comisión Europea cree que el retraso del Gobierno español para responder a las autoridades comunitarias "agrava" su situación, al no plantear argumentos en defensa de esa demora. De todas formas, Bruselas podría analizar las nuevas funciones de la CNE sin la respuesta de España, porque ya tiene "bastante" información, según Ep. "Para llegar a una conclusión no precisamos necesariamente la información del Ejecutivo de España", afirmó ayer el portavoz de Mercado Interior de la UE, Oliver Drewes.Bruselas envió el pasado 3 de marzo un carta a las autoridades españolas en la que pedía explicaciones en un plazo máximo de 10 días sobre las nuevas competencias de la CNE, al considerar que podía vulnerar el principio de circulación de capitales y el derecho de establecimiento. El Gobierno español pidió más tiempo para responder pero la Comisión Europea denegó la prórroga, por lo que el último día fue el 17 de marzo.Por su parte, el Ejecutivo de José Luis Rodríguez Zapatero ha manifestado reiteradamente su intención de mantener un "diálogo constructivo" con Bruselas sobre este tema. Y es que ya se estudia una fecha para responder: después del 23 de marzo. El Gobierno enviará la información tras ratificar en el Congreso de los Diputados el próximo jueves el decreto que amplía las funciones de la CNE y la nueva casación del pool. El Ejecutivo español envió el viernes pasado una carta a la UE donde se comprometía a enviar la información requerida lo antes posible, tras los trámites parlamentarios.