Los préstamos a familias y empresas crecieron tan solo un 0,2% durante el mes de diciembreLa financiación a las Administraciones Públicas, por contra, se disparó el pasado ejercicio un 20%madrid. La banca se ha defendido estas últimas semanas de los ataques del Gobierno sobre el cierre del grifo de la financiación a empresas y familias. El sector lo niega y dice que la desaceleración en los préstamos se debe a la falta de solvencia de los clientes y la menor demanda. ¿Pero cuáles son los datos? El Banco de España aportó ayer las primeras cifras provisionales del conjunto del ejercicio 2008. El aumento fue del 6,3 por ciento, menos de la mitad que un año antes, pero en los números se aprecia un frenazo en la recta final. En el cuarto trimestre, el crédito tan sólo se incrementó un 1 por ciento, tres veces menos que en el mismo periodo de 2007, y cuatro veces menos que en los primeros tres meses de 2008. En diciembre, el alza fue únicamente del 0,2 por ciento, frente a casi el 1 por ciento del mismo mes de 2007 con respecto a noviembre. Las previsiones no son más optimistas, porque la mayoría de agentes financieros prevé crecimientos ligeramente superiores al 1 por ciento o incluso descensos. Todo dependerá de la evolución de la economía y el fondo de la recesión. Desplome de las hipotecas En el caso de las hipotecas nuevas, éstas han experimentado una caída del 40 por ciento, hasta los 87.074 millones, aunque propiciado por el desplome de la venta de pisos. De lo que no ha tenido que escudarse la banca es de los créditos a las Administraciones Públicas, entre las que se encuentra el Ejecutivo. No le ha hecho falta, porque lejos de desacelerarse, los préstamos a estas instituciones se han disparado un 20 por ciento. Según los datos provisionales del Banco de España, las entidades tenían concedidos créditos por valor de 57.983 millones de euros a los ayuntamientos, comunidades autónomas y Estado central a finales de 2008, sobre todo por el incremento de diciembre. Un año antes, la cifra tan sólo ascendía 48.569 millones y había descendido ligeramente (un 0,1 por ciento) con respecto al ejercicio precedente. Las Administraciones Públicas se han visto obligadas a acudir a las sucursales para poder hacer frente a sus compromisos tras el hundimiento de los ingresos como consecuencia de la crisis económica, principalmente las corporaciones locales y las autonomías. Unas y otras retiraron el año pasado depósitos bancarios por 10.200 millones. Tienen unos ahorros valorados en 52.102 millones de euros. Esta retirada contrasta con los fondos de los hogares y las empresas, que subieron un 16 por ciento. La guerra del pasivo, que está a punto de desaparecer, ha elevado la tasa de liquidez de las entidades 9 puntos básicos, y ya financia el 84 por ciento de los créditos que concede con los depósitos que logra de los clientes. La guerra va a terminar por la bajada de los tipos de interés en la zona euro. El Gobierno pide "cariño" La polémica sobre la financiación ha amainado después de la reunión que mantuvo la semana pasada el presidente del Gobierno con los banqueros. No obstante, todavía hay algunos coletazos. Mientras la ministra de vivienda, Beatriz Corredor, pide clemencia y cariño a la banca, el vicesecretario del PSOE, José Blanco, dice que "aunque el crédito es mayor, no es suficiente". Blanco afirmó ayer que el "crédito" y, por lo tanto, la "liquidez" ha aumentado y es "mayor que hace un mes" gracias a la mediación del Gobierno y a sus gestiones con el sistema bancario, aunque reconoció que es "insuficiente" para garantizar la financiación de las empresas. Recordó que el Ejecutivo estatal ha "flexibilizado" las condiciones para que pueda fluir "con más intensidad" el dinero y que el ICO asuma mayor riesgo con el fin de facilitar el crédito, porque la mayor parte de sus programas, como ha publicado este periódico, no funcionaban con normalidad. Por su parte, Corredor, fue más crítica y defendió que la inmensa mayoría de las familias españolas son "plenamente solventes y responsables", por lo que se merecen que la banca les "mire con cariño" a la hora de solicitar una hipoteca. La mayor parte de las entidades ha declarado que sólo conceden préstamos a los clientes que son solventes y tengan capacidad suficientes para devolver el dinero. Corredor apeló, durante su intervención en el Fórum de Economía, reiteradas veces a la "responsabilidad" de bancos y cajas de ahorros para que vuelvan a abrir el grifo de la financiación, condición fundamental, a su juicio, para la reactivación del sector inmobiliario y de la economía.