Los daños colaterales del fraude de Gowex
La sombra de Gowex es demasiado alargada. El fraude de Jenaro García deja una larga lista de damnificados cuyo prestigio ha quedado seriamente dañado. Desde los órganos de control que, como se ha demostrado, no se enteraron de nada, hasta las casas de análisis, que recomendaban comprar acciones de una empresa de la que ni se molestaron en comprobar sus cuentas. Otros perjudicados son las cotizadas del MAB, los propios trabajadores y la Marca España. Si bien es cierto que estafas hay en todos los países y negocios, la Charada Pescanova llueve sobre mojado. Lo ocurrido en Gowex es fundamental para corregir deficiencias y poner transparencia en un mercado necesario para el crecimiento de las pequeñas y medianas empresas.