Una de las principales advertencias que se hace en bolsa cuando se acerca el verano es ¡cuidado con la volatilidad! Y es que ésta suele aumentar, lo que implica que el inversor puede llevarse sustos debido a movimientos más bruscos en el mercado.
Una de las razones de ese incremento de la volatilidad es la caída en el volumen de negociación. Este parámetro indica la cantidad de títulos, operaciones o dinero que se mueve en bolsa en un determinado periodo por lo que, podríamos decir, que representa cuántos participantes activos hay en mercado.