Si hay un sector económico que se haya visto beneficiado por la llegada de Donald Trump a la Casa Blanca tras las elecciones del pasado mes de noviembre, ese ha sido el bancario.
El selectivo estadounidense que reúne a las firmas más grandes por capitalización de este ámbito, el S&P 500 Banks Industry, es uno de los más alcistas desde el pasado 4 de noviembre al revalorizarse más de un 30% desde entonces. Un comportamiento muy superior al registrado por el propio S&P 500, que se anota en el mismo periodo de tiempo un 18%.