"Agua de enero, cada gota vale un dinero" es el refrán con el que los agricultores explican que un primer mes del año lluvioso garantiza una buena cosecha. Este ejemplo de sabiduría popular no se puede aplicar literalmente al universo de los mercados financieros, pero sí es útil si se versiona a "invertir en agua coincidiendo con su día mundial renta, de media, cerca de un 5% si se recogen los frutos a finales de mayo".
El 22 de marzo se celebra una jornada global por este recurso esencial promovida por la Organización de la Naciones Unidas, que en 2017 ha elegido el lema "¿Por qué desperdiciar agua?" para revindicar la importancia del elemento clave del desarrollo del ser humano a todos los niveles: salud, economía, medio ambiente...