La Biblia dice que "todo tiene su momento" y al menos en la bolsa parece ser verdad. Analistas y traders con experiencia coinciden en que hay que tener en cuenta los horarios a la hora de operar, sobre todo a corto plazo, y concluyen que las primeras horas de cada mercado son las mejores para conseguir beneficios.
Para los inversores que piensan en estrategias a medio y largo plazo los horarios de los mercados no deberían ser un quebradero de cabeza. Sin embargo, otra perspectiva totalmente diferente es la que deben asumir los más agresivos, los que prefieren realizar operaciones intradía o en un corto periodo de tiempo.
En estos casos, los inversores deben tener en cuenta la publicación de datos macroeconómicos (PIB, empleo o IPC), las presentaciones de resultados u otros anuncios de las compañías, los efectos que estos puedan tener sobre los mercados de renta variable y la correlación de unos mercados con otros.
Acontecimientos de los que depende el volumen de negociación y que configuran los horarios más calientes en las bolsas. En España, por ejemplo, Juan José Martínez, jefe de estrategias de JM Kapital Eafi, considera que "de 9 a 11 horas es una franja horaria muy buena para operar en índices y acciones".
"En esta franja horaria es donde encontraremos mayor liquidez pero también más volatilidad. Depende de nuestra operativa el entrar o no, pero salvando los momentos de mayor fluctuación cuando abren la mayoría de las bolsas o cuando se publican datos, se pueden conseguir buenas entradas en el mercado", explica Martínez.
A partir de las 12, los mercados europeos se convierten en un remanso de paz. "Europa suele quedarse parada a la espera de la llegada al mediodía de los datos macroeconómicos de Estados Unidos", continúa el experto de JM Kapital. Una afirmación que comparte el analista independiente Ismael de la Cruz: "Los mercados europeos, por la mañana tienen su propia personalidad. Incluso les da igual lo que hagan los futuros del S&P 500, Dow Jones o Nasdaq. En cambio, a partir de las 15.30, con Wall Street abierto, Europa pierde parte de su personalidad y toma como referencia a Estados Unidos".
Los datos confirman estas observaciones. Durante esta semana, gigantes del Ibex 35 como Telefónica o Banco Santander han registrado sus mayores volúmenes de negociación durante las primeras horas de la mañana, al igual que ha ocurrido con otros grandes valores europeos como Total, Sanofi o Bayer. Pero además, en todos ellos el volumen repunta también en las últimas horas de las sesiones.
"La segunda fase de interés son las dos horas en las que coincide de la apertura de Wall Street y el cierre europeo. Es una franja donde se mueve la mayor parte del volumen del día y las bolsas nos darán las mejores oportunidades de entrada", advierte Juan José Martínez.
En la misma línea, De la Cruz opina que se trata de un momento en el que "un índice europeo, por ejemplo el Dax, llega a un soporte y esperamos que rebote al alza, si resulta que el S&P 500 o el Dow Jones no tiene también un soporte ahí, no tiene por qué rebotar, con lo que puede seguir cayendo, de manera que el Dax tiene el riesgo de que siga al americano y no rebote en su soporte".
Tanto es así que Martínez concluye que "el día que Europa cotiza sin la referencia de Wall Street suele ser un día de transito sin incidencia alguna, lo que pone de manifiesto lo tremendamente dependientes que somos de Estados Unidos", aunque matiza que "en estos momentos quizá menos, debido a la intervención de los bancos centrales".