Tras haber recuperado un 61,80/66% de la caída previa, el mercado de renta variable estadounidense ha registrado una sesión de caídas que podrían anunciar una extenuación de los toros.
Pese a que la presión vendedora no provocó un descenso en bolsa superior al 1% en ninguno de los selectivos estadounidenses, los osos dominaron de principio a fin la sesión en el parqué estadounidense. Un hecho que sirvió para poner fin a la subida iniciada el pasado 15 de octubre.
"El alcance de un ajuste del 61,80/66% de toda la caída previa está provocando que la presión vendedora se imponga", afirma Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, que además añade que "una corrección de parte de la última subida es algo bastante probable".
Los descensos además destacables de la sesión vinieron esta vez de la mano del Dow Jones que se dejo cerca de un 0,7% en la sesión. Una caída de la que es principal protagonista Boeing (BA.NY), la empresa aeronáutica que forma parte de elMonitor por sus sólidos fundamentales, que se dejó cerca de un 4%.
La firma estadounidense presentó en la sesión de hoy sus cuentas correspondientes al tercer trimestre de su ejercicio fiscal, publicando un incremento de sus beneficios del 19% interanual. El primer fabricante de aeronaves del mundo volvió a batir las estimaciones de los analistas en una presentación de resultados. Sin embargo, el mercado no acogió la presentación con optimismo ante la preocupación que genera en los inversores que la compañía todavía no sea capaz de reducir los costes en la producción de sus aeronaves 787 Dreamliner
Este comportamiento contrasta con el registrado en la sesión de hoy en Europa donde las subidas fueron generalizadas en los selectivos de referencia.
"Los principales índices europeos han conseguido cerrar los huecos que generaron a la baja la semana pasada, algo que es una nueva señal de fortaleza que sugiere un próximo ataque a la próxima resistencia que aparece en los máximos de la semana pasada" señala Cabrero.
En este sentido, la prolongación de las subidas y, por ende, la superación de los citados máximos de la semana pasada (como son los 10.275 puntos del Ibex 35) favorecería un alejamiento del riesgo de seguir viendo más caídas.