Después de una sesión donde los bajistas camparon a su antojo en Europa y en EEUU, se clausura la estrategia abierta sobre el selectivo tecnológico que perfora con claridad los 4.000 puntos, su nivel de soporte clave.
Esta vez no hubo ningún tipo de indecisión. Los osos se impusieron de manera clara en todos y cada uno de los selectivos de renta variable de Europa y EEUU, y las consecuencias fueron igual de cristalinas.