Mientras la pérdida de soportes hace que los rebotes en Europa sean potencialmente vulnerables, en EEUU quedan bastiones que aguantan sobre niveles clave. Reabrimos una estrategia en el principal: el Nasdaq.
Desde finales de julio comenzamos a advertir que las señales apuntaban a que los bajistas habían dado un duro golpe a la línea de flotación de las bolsas (en forma de pérdida de los mínimos del mes anterior). Sin embargo, enseguida quedó patente que había una notable excepción: los soportes siguieron intactos en dos índices estadounidenses. Dos referencias amplias del mercado, el Russell 2000 y el Nasdaq Composite. Ambos viejos conocidos de nuestra cartera.