La red social supera los 50 dólares en su debut en bolsa, muy por encima de los 26 de su OPV. Pero sus homólogos muestran ciertos síntomas de agotamiento a corto. ¿Podrá el pájaro azul seguir volando alto?
Una salida a bolsa de una gran compañía siempre genera mucha expectación. Pero hay algunos casos en los que los ánimos se agitan más de lo habitual en un debut. Y un buen ejemplo lo está dando Twitter. Tras anunciar, la pasada madrugada hora española, que debutaría en 26 dólares, el primer precio que ha marcado en su sesión inicial en Wall Street han sido los 45,1 dólares y ha llegado poco después incluso hasta los 50,05. Una subida del 90% respecto a su precio de lanzamiento.
Aún es, evidentemente, muy prematuro poder valorar la compañía por técnico. Deberán pasar "algunas semanas, puede que incluso meses" para que el gráfico permita identificar tendencias interesantes, tal como señala Joan Cabrero, analista de Ágora A.F. Pero fijándonos en sus homólogos nos podemos hacer una idea de en qué momento están las redes sociales en el parqué.
Baste como ejemplo la sesión de hoy y el comportamiento de dos de sus competidores más directos, LinkedIn y Facebook: a esta hora ceden un 2,9 y un 2,4% (y la primera ha llegado a perder incluso un 3,4%). Y es que a corto plazo se aprecian ciertos síntomas de agotamiento en bolsa de estas empresas.
La red social creada por Mark Zuckerberg está en la tabla de seguimiento de Ecotrader desde el pasado 10 de julio, y desde que forma parte de la cartera ha sumado una rentabilidad superior al 90%. Está claro que "Facebook está en subida libre en plazos más largos. Y no mostrará debilidad mientras no pierda los 46,5 dólares primero y más aún los 45 (hoy ha marcado mínimos de la jornada en 47,7). Pero si ceden estos niveles, nos marcaría una corrección peligrosa a corto plazo que podría incluso obligar a plantearse un cierre (para proteger los beneficios)", advierte Cabrero.
La situación de LinkedIn es algo más delicada: "se ha ido a soportes clave a corto plazo, que tiene a la altura de los 213 dólares, cifra que marca la parte baja de un amplio hueco alcista que abrió el pasado 2 de agosto (tras sorprender positivamente con sus cuentas). Habría que poner el filtro a la altura de los 210/212 dólares, que de caer marcarían un deterioro a corto plazo similar al que señalamos en el caso de Facebook", concluye Cabrero.