Los mercados americanos se apoyan en el dólar, en máximos desde noviembre, para no dejarse llevar por la pasión chipriota.
Es sólo una pequeña isla que solo supone el 0,2% del PIB de la eurozona pero el miedo a que el polémico rescate a Chipre se trasponga a otros países europeos y sobre todo la incertidumbre que se respira en el Parlamento chipriota, que ha terminando por rechazar la quita en depósitos a cambio del rescate , ha sido suficiente como para que Wall Street se haya dejado llevar en parte por el mal cierre europeo, aunque con caídas muy muy alejadas de dramatismo.