Se espera que incremente su ritmo de crecimiento en los próximos meses. Es la única gran economía 'en desarrollo' cuya bolsa nos ha dado una señal de compra este verano.
En un contexto económico difícil en el que la recesión parece arreciar, los mercados emergentes están reaccionando de formas diferentes, lo que también afecta a nuestras estrategias en China, India y Brasil. De todos ellos, es el índice brasileño el que consigue dar conexión, apoyado en las nuevas previsiones de crecimiento que se manejan para el país.
De hecho, desde finales de julio, el Bovespa, incluido en la tabla de seguimiento, acumula un avance superior al 11%, mientras que el índice CSI de China acumula una caída próxima al 6,5% y el Sensex indio avanza casi un 4%. De hecho, ha sido el único índice emergente que nos ha lanzado una señal de compra este verano.
Y esto es por algo. Los últimos datos macroeconómicos de Brasil, unido al plan de estímulo que ha implementado el Gobierno de Dilma Rousseff, han mejorado las expectativas de la economía del país. Los analistas están esperando que su economía se acelere en lo que nos queda de ejercicio. Para el tercer trimestre de 2012, pronostican una crecimiento del 2,19%. Durante el segundo trimestre, la mejora del PIB fue del 0,93%. Además, esos pronósticos están mejorando.
Hace un mes, la estimación era que la economía brasileña mejorara un 2,10% en el tercer trimestre de este año, de acuerdo con los datos recopilados por Bloomberg. "La recuperación parece estar ganando impulso y volviéndose cada vez más generalizada", apuntan los analistas de Barclays.
Se espera, asimismo, que el acelerón no se quede sólo en el tercer trimestre. Para 2013 se prevé un incremento del PIB por encima del 3,5%, según la media de analistas que recoge Bloomberg. De esta forma se deja sentir el plan del Ejecutivo carioca de reanimar el crecimiento de su economía con un proyecto dotado de 66.500 millones de dólares para mejorar las infraestructuras del país y atraer la inversión extranjera.
Esto se une a las buenas cifras de la inversión exterior en el país del mes de julio, que crecieron un 44,6% en julio frente al mes anterior con un montante de 8.421 millones de dólares. Esta cifra superó en un 20% las previsiones de los analistas, lo que da muestras del atractivo que conserva el país para los inversores.
La celebración de dos de los eventos deportivos por excelencia en el país carioca, el Mundial de fútbol en 2014 y los Juegos Olímpicos de 2016 son dos motivos más para confiar en el dinamismo de una economía que parece que vuelve a dar señales de fortaleza.
Y esas mejoras se notan en otra cosa: la tasa de paro. Se prevé, en su conjunto, mejor que a lo largo de 2011.
Y todo ello en un contexto complicado, donde el panorama internacional sigue dar conexión. De hecho los analistas avisan "hay que vigilar los precios de las materias primas, que tienen un peso importante en la economía del país, así como las presiones inflacionistas que podrían derivarse de un QE3 en EEUU", advierte Alain Galibert, analista de Ágora A.F.
En cualquier caso, esta corriente de optimismo ha llegado al principal índice brasileño, el Bovespa, estrategia abierta en la tabla de seguimiento, y que ha vivido un avance superior al 11% desde finales de julio.
Estas previsiones muestran a Brasil como una isla entre el resto de emergentes que están sufriendo el azote de la crisis. Así, China no consigue carburar, lo que queda reflejado en la evolución del Shanghai Composite que en las últimas sesiones profundiza sus mínimos desde el año 2009 en el entorno de los2.055 puntos. En concreto, desde el inicio del año, el índice de la bolsa de Shanghai acumula unas pérdidas superiores al 6,5%. Tampoco encuentra su camino el índice Hang Seng (HANGSENG.1) de la bolsa de Hong Kong, que "se enfrenta al entorno resistivo de los 20.300/20.500 puntos, por lo que si no consigue batirlos podría formar un giro bajista relevante, se abriría la posibilidad de ver una vuelta a la zona crítica de soporte de los 18.000 puntos", advierte Joan Cabrero, analista de Ágora A.F.
A pesar de todo, nuestra estrategia abierta en el China Index Fund se mantiene en números verdes con unas ganancias que superan el 6% desde su apertura en abril de 2009.
Peor es la situación en India, que "sufre una gran caída en su producción industrial, el motor de su crecimiento en los últimos años", advierte Galibert. "En India no hay una clase media tan expandida como en otros emergentes, por lo que la crisis exterior multiplica sus problemas", opina este experto. Y si el mercado interior no mejora, tampoco lo hacen sus exportaciones, que aceleraron su caída en junio hasta el 5,5%, frente a la contracción del 4,2% experimentada el mes anterior. En este contexto, nuestra estrategia en el ETF India cotiza en plano desde su apertura en octubre de 2011.