Un buen susto a la espera del cierre semanal

Wall Street da un susto tras caer con fuerza. La incertidumbre sobre la economía global pide paso a la crisis de deuda soberana en Europa.

No va a ser tan fácil. Ese es el mensaje que ha lanzado Wall Street al mercado. "Es innegable, a falta de cierre semanal, que el mercado nos ha puesto el miedo en el cuerpo", señala Carlos Doblado, jefe de estrategia de Ágora A. F. Y es que, si Europa vivió descensos, aunque leves, al otro lado del Atlántico las caídas superaron el 2% en algún caso.

El Dow Jones terminó con un castigo similar a esa cifra, mientras que el Nasdaq sufrió un 2,5%. "Hemos visto una inesperada violencia bajista al cierre de la sesión, que consiguió llevar a la volatilidad de nuevo a los 20 puntos y a los índices en muchos casos más allá de lo que hubiera parecido razonable en un pull-back hacia las antiguas zonas clave que no esperábamos ver tan pronto", indica Doblado.

Y es que por un día la marcha de la economía global tomó el relevo a la crisis de deuda soberana europea. Los flojos datos publicados en China tuvieron su colofón con las decepciones económicas que llegaron con la publicación de otras referencias en EEUU, como la venta de viviendas de segunda mano o el índice de actividad económica de la Fed de Filadelfia. Todo en su conjunto avivó el miedo a una ralentización global de la economía (hay que recordar que el miércoles la Reserva Federal estadounidense rebajó sus previsiones de PIB para Estados Unidos). Pero incluso con peores datos al otro lado del Atlántico, el dólar se fortaleció contra el euro, llevando a la divisa europea a ceder algo más de un 1% hasta los 1,255 dólares.

Junto con la bolsa, también las materias primas sufrieron las peores expectativas. Entre ellas, los metales industriales: el cobre acusó un descenso del 2,7% por las previsiones de caída de la demanda. El crudo continuó con su racha bajista, lo que llevó al barril de referencia en Europa, el Brent, a cotizar por debajo de los 90 dólares y al West Texas norteamericano a ceder el soporte que señalaban los estrategas de Ecotrader, situado en los 80 dólares. Ni siquiera el activo refugio actuó como tal, porque los inversores también vendieron oro. Llevaron el precio del lingote hasta el entorno de los 1.568 dólares, tras caer casi un 3%.

En el mercado de deuda sí hubo, al menos, cierto relax. Los rumores de que el BCE pueda estar estudiando rebajar las garantías que exige como contraprestación para conceder préstamos llevó la calma a la prima de riesgo española. Tanto que, aunque cerró en 507 puntos, a lo largo del día llegó a perder el umbral de los 500 puntos. Algo que no sucedía desde hace 9 sesiones. Ya se sabe el resultado de las auditorías a la banca española que podría necesitar, en el peor de los casos hasta 62.000 millones de euros. En este sentido, el Eurogrupo pidió a España que formalice su petición de ayuda el próximo lunes.

Pendientes de la cumbre

Finalizamos la semana con la cumbre del crecimiento que celebrarán los dirigentes de España, Italia, Alemania y Francia en Roma, de cara a la Cumbre Europea que se celebrará el 28 y 29 de este mismo mes y que se centrará en la crisis de la eurozona. También se reunirá el ECOFIN ?Consejo de Asuntos Económicos y Financieros de la Unión europea-.

En Italia se revela el índice de confianza del consumidor del mes de Junio. En Alemania se darán a conocer los resultados del índice de confianza empresarial del país ?IFO-.