Con su reaparición consiguieron maquillar las pérdidas semanales a ambos lados del Atlántico.
El ataque bajista se quedó en un intento. Por ahora en nada más que una anécdota en mitad de la semana que, eso sí, cuando provocó que los índices europeos perdiesen soportes el martes, nos llevó a replegar velas y reducir la exposición a bolsa. "El juego del acordeón, adaptar la exposición en función de los acontecimientos, es lo único que al final acaba teniendo sentido en una gestión activa que tenga como meta la preservación del capital", señala Carlos Doblado, jefe de análisis de Ágora Asesores Financieros. Pero los alcistas contraatacaron.
Lo hicieron en Europa, con pequeñas alzas que maquillaron las pérdidas semanales para dejarlas en menos del 1% en el caso del parqué alemán y el galo, aunque el Ibex 35 no pudo evitar ceder un 3,3% semanal. De hecho, el índice se está quedando atrás. Por contra, Italia, que se mostró más fuerte, nos llevó a comenzar la semana elevando exposición a la estrategia que mantenemos sobre el Mib 30.
Pero los toros también reaparecieron en Wall Street, donde las pequeñas alzas del 0,11% en el caso del Dow Jones o del 0,4% en el del S&P500 dejaron mejor sabor de boca. "Ha sido una semana de altibajos sin ningún mensaje técnico en Wall Street, que ha venido a perforar directrices alcistas que, antes de su ruptura, hemos sostenido que deberían vulnerarse en algún momento más o menos cercano sin que ello fuera demasiado problemático", indica Doblado.
La semana termina, además, con la noticia de que la Asociación Internacional de Permutas y Derivados (ISDA) ha considerado que la quita de deuda Griega implica un impago que hará que se activen los seguros de crédito o CDS.
En divisas, el euro consiguió defender en el cierre semanal el nivel de los 1,31 dólares, que ahora es la clave. La fortaleza de última hora del dólar le complicó las cosas a la moneda única, después de que se publicasen los datos de empleo en EEUU durante el mes de febrero.
La semana que viene habrá reunión del Eurogrupo y, además, se publicarán datos relevantes como el IPC de la Eurozona, después de que el presidente del BCE, Mario Draghi, advirtiese esta semana sobre las presiones inflacionistas. Además, también se producirá la reunión mensual de la Reserva Federal estadounidense, que acaparará la atención del mercado después de que Ben Bernanke borrase las expectativas de mayores planes de estímulo como el QE3.