Que la espantada bajista del lunes no haya tenido continuidad refuerza nuestra idea de que estamos ante una simple fase de consolidación temporal de las últimas alzas, tras la cual lo más probable es que asistamos a nuevas subidas que acaben superando los máximos que las bolsas europeas establecieron la semana pasada o, en el caso del Ibex 35, hace dos semanas en los 8.322, muy cerca del objetivo que manejábamos en los 8.360-8.460, que no descartamos que aún pueda ser alcanzado.
Que se haya asistido a esta corrección es algo que no nos sorprende como prueba el hecho que desde hace dos semanas venimos recomendando recoger beneficios parciales en muchas de las estrategias que tenemos abiertas, lo cual ha hecho bajar la exposición recomendada a bolsa del 75 al 60%.
Todavía es pronto para dar por cancelada la posibilidad de asistir a una continuidad del rally alcista que nació a finales de octubre y aún podríamos ver nuevos máximos antes de ver un techo de orden mayor en las bolsas, esto es un techo que provoque una corrección sostenible en próximos meses, que se podría asemejar a la vista entre julio y octubre y que llevó al EuroStoxx 50 de los 3.450 a los 2.920.
Este techo es difícil que lo veamos mientras el Índice Dólar no alcance los mínimos de 2018 y cuando tome cuerpo provocará esa corrección que allanará el camino para volver a comprar y que los rezagados tengan lo que hemos llamado la segunda oportunidad. La tendrían antes si las caídas de corto profundizan y llevan al Ibex a los 7.550 y al EuroStoxx a 3.330.