Los futuros del crudo se hundieron ayer entre un 5% y un 6%, algo que no sucedía con tanta virulencia desde el pasado 23 de noviembre. El petróleo Brent cayó hasta los 56,5 dólares por barril, lo que supone un descenso del 5,2% con respecto al precio registrado el lunes. En lo que va de año, pierde un 15% de su valor y vuelve a niveles de octubre de hace un año.
En esta misma línea se están comportando también los futuros del West Texas, que se desploman en torno a un 7% con respecto a la jornada anterior y cotizan en la zona de los 46,4 dólares por barril, lo que representa una pérdida del 23% de su valor.