Los sectores más expuestos a la evolución del ciclo económico entre los presentes en las bolsas europeas están sufriendo las consecuencias de la desaceleración de la que vienen advirtiendo las principales instituciones -como el FMI o el BCE-, que se está viendo en los indicadores de crecimiento y que, sobre todo, se está escenificando en los parqués.
Desde que empezó el presente ejercicio, los analistas han mordido entre un 9% y un 4% las estimaciones de beneficio por acción (BPA) de cara a 2019 de las industrias del ocio y los viajes, de la publicidad y los medios de comunicación, de los bienes y servicios industriales, de los bancos y de los automóviles y fabricantes de componentes.