La corrección bajista que está desarrollando la cotización del Santander a lo largo de los últimos meses está sirviendo para que el título ajuste la tendencia alcista que nació en los 2,80 euros y que encontró techo en la zona de los 6 euros.
Esta corrección se mantiene del todo vigente y nos sorprendería que pudiera haber un giro al alza sostenible en el tiempo sin que el precio alcance la zona de giro potencial de los 3,85-4 euros, cuyo alcance supondría un ajuste del 61,80/66% de toda la tendencia alcista anterior descrita. Hasta ese entorno de soporte de los 3,85-4 euros no buscaríamos una ventana de compra y mientras no se alcance todo apunta a que eventuales rebotes que se formen serán vulnerables.