Si ayer el Ibex se presentaba como el eslabón más débil de la cadena al ser el único índice de Europa que no había logrado batir sus resistencias de corto plazo (los 10.336 puntos), hoy lo sigue siendo. El selectivo español sigue demostrando cierta debilidad relativa al haber rebasado los niveles clave a los que se enfrentaba por la mínima.
"La superación de los 10.366 puntos plantea que los recientes mínimos establecidos por el Ibex 35 en los 10.087 puntos han sido el suelo de la última fase de consolidación que ha vivido el índice bursátil", señala Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, que asegura que la ruptura de este nivel "es algo que no nos sorprende atendiendo al comportamiento del resto de índices europeos".