Una revisión positiva del PIB del segundo trimestre en los Estados Unidos unido a los buenos datos de empleo publicados en el país norteamericano favorecieron ayer el cambio de tendencia en el par euro/dólar. El cruce más vigilado del mundo en las últimas sesiones ha mostrado signos de cierta debilidad en las últimas horas y esto ha representado una burbuja de oxigeno para las firmas más exportadoras de Europa.
"No nos sorprendería que pudiéramos ver otra consolidación en el par", señala Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, que señala que "esto es algo que podría encajar con un rebote en el índice dólar que ha girado al alza desde una importante zona de soporte como son los mínimos del año pasado".
Todo ello ha servido como respiro para el mercado de renta variable europeo, que en las últimas sesiones se había visto más afectado si cabe por la fortaleza de la divisa única. De hecho, el EuroStoxx 50 se ha dejado cerca de un 7% desde los máximos de mayo, cuando el euro se intercambiaba por 1,10 dólares -desde ese nivel se ha apreciado un 8,3% hasta ahora-.
Sin embargo no hay que precipitarse. En el mercado hay que ir siempre con pies de plomo. Los moderados ascensos de ayer llevaron al Ibex 35 a alejarse ligeramente de la zona de soporte clave que presenta en los mínimos de abril, pero para alejar el riesgo bajista se debe ir más allá.
"Para alejar el riesgo de asistir a una consolidación más amplia se debe cerrar el hueco que se abrió a la baja a partir de los 10.285 puntos", asegura Cabrero. Si este hueco se cerrara se estaría delante de un clásico "gap de agotamiento vendedor".
En el EuroStoxx, los niveles análogos se encuentran en los 3.421 puntos. Por tanto, no se podrá hablar de fortaleza ni se alejará el riesgo de asistir a la pérdida de soportes mientras el selectivo europeo no cierre el hueco bajista que abrió a partir de dicha cota, de la que se encuentra a un 0,5% desde los niveles de cierre de ayer.
Mientras tanto, hay que vigilar el comportamiento de estrategias como Sacyr o como Ferrovial, que pueden dar señales de fortaleza y sentar las bases de un giro alcista que sirva para que su curva de precios retome su tendencia alcista principal.