Casi un 13%. Eso es lo que se revalorizan, de media, las compañías que se han lanzado a debutar en el mercado de renta variable en 2017.
Desde que empezó el ejercicio, más de 400 compañías han comenzado a cotizar en bolsa en el mundo. Y, si bien es cierto que más de un 70% de las mismas han conseguido cosechar una rentabilidad positiva desde entonces, también lo es que de media, su rentabilidad no alcanza siquiera a la registrada por los principales selectivos de renta variable de Europa o EEUU, por ejemplo.
El rendimiento medio obtenida en las OPV de 2017 se ha visto lastrado principalmente por el mal comportamiento que han registrado desde que han debutado a lo largo del año las firmas más ligadas al sector petrolero. Y es que, el descenso que acumula el precio del crudo desde enero ronda ya el 18%.
En este sentido, firmas como Kinder Morgan, que sacó en el mes abril a bolsa su filial en Canadá, o Antero Midstream, son algunas de las que más destacan por haber cosechado números rojos en el parqué desde su debut bursátil este ejercicio.
De hecho, la primera de ellas es la más bajista de entre las firmas más grandes que han salido a bolsa en 2017. Su OPV, que rondó los 1.200 millones de euros en abril de este año, ha dado paso a una caída en el mercado de renta variable superior al 8%.
Tampoco han logrado registrar ganancias las firmas debutantes en Oriente Medio, especialmente las de Dubai y Emiratos Árabes, inmersos en plena crisis geopolítica tras el corte de lazos diplomáticos entre ellos. El mejor ejemplo de ello es el caso de la dubaití Ades International Holding que capitaliza casi 600 millones de dólares y que desde su debut en mayo se ha dejado más de un 8% en bolsa.
En el lado contrario de la balanza se encuentran las debutantes del mercado asiático, que de media se revalorizan más de un 15%. En este sentido, las empresas de consumo no cíclicio también destacan entre las más alcistas del ejercicio al repuntar más de un 25%.
Y si hay un caso que destaque entre los debuts de este año, es el de la conocida Snapchat, que se mantiene plana desde su OPV a pesar de los bandazos que ha vivido su acción en el mercado estadounidense.