Los principales selectivos de Estados Unidos han cerrado su segunda semana consecutiva de ascensos, con la excepción de la tecnología. El crudo ha sido el motor de las subidas ya que el mercado descuenta que, pese a la falta de acuerdo de con respecto a congelar la producción el pasado domingo en Doha entre la OPEP y otros países como Rusia, la sobreoferta se corregirá antes de que acabe el año. La renta variable ha seguido al petróleo que, con esta, cierra tres semanas consecutivas al alza.
Si el crudo arrancaba la semana a la baja por la falta de acuerdo en Doha. Sin embargo, giró al alza gracias a la huelga de trabajadores del sector en Kuwait así como a la caída de la producción el pasado mes en Colombia y, sobre todo, en Estados Unidos. En concreto, la semana pasada, la producción de crudo en EEUU descendió en 24.000 barriles diarios hasta 8,95 millones, "lo que supone su menor nivel desde octubre de 2014", señala Felipe López-Gálvez, analista de Self Bank. A todo ello se sumaba que Irak ha indicado que los principales productores iban a revivir sus conversaciones para congelar la producción tras el fracaso en el encuentro del pasado domingo en Doha. Algo que apoyan desde Morabanc ya que indican que "mantenemos el sobreponderar ya que en junio habrá otro intento".