Grifols cierra 2014 en negativo tras tres años consecutivos revalorizándose en el parqué pero con una fuerte mejora de su recomendación por parte de las firmas de análisis en el último mes.
En 2011, la farmacéutica se apuntó una subida del 36%, en 2012, del 110%, y en 2013, del 31%. Cosechas a las que no ha podido ni siquiera acercarse en un 2014 que acabará en negativo. Aunque, siempre que continúe la tendencia de los últimos 30 días, podría comenzar el nuevo año con una recomendación de compra.
Un hecho que deja entrever que en 2015 Grifols podría recuperar la tendencia de los últimos años. Al menos, así lo considera el consenso de mercado, que para los próximos 12 meses concede a sus títulos un potencial alcista del 12% hasta los 37,63 euros en los que sitúa su precio objetivo.
Sin embargo, Grifols, cuyos ingresos dependen en un 15% de Estados Unidos, deberá superar el impacto que pueda tener sobre sus cuentas el efecto dólar. De hecho, la alta exposición a la moneda norteamericana es el mayor riesgo que las firmas de análisis señalan para la farmacéutica en el ejercicio que arranca.
Por el momento, las estimaciones sitúan su beneficio neto al cierre de 2014 en 374 millones de euros, un 34% más que lo que obtuvo en 2013, pero una cifra inferior a los 543 millones de euros que se espera que gane en 2015.