La explosión de optimismo aleja al mercado americano de soportes y permite un respiro en Europa.
Las palabras del presidente del Banco Central Europeo (BCE), Mario Draghi, fueron lo que demandaba el mercado, y así quedó demostrado con las subidas generalizadas cosechadas por las principales plazas bursátiles mundiales y la relajación de las primas de riesgo en los países periféricos europeos.