El rebote que estamos viendo a corto plazo está siendo de la misma intensidad y rapidez que el desplome que tuvo lugar previamente, algo que no me sorprende ya que esto es habitual de mercados bajistas como el que parecen haber entrado las bolsas europeas desde que se perdieron soportes clave como los 4.000/4.050 del EuroStoxx 50 y los 14.800/15.000 puntos del DAX alemán, que en repetidas ocasiones señalamos desde elEconomista.
La pérdida de estos soportes advirtió de la posibilidad de que pudiéramos asistir a una corrección del 10% adicional, hasta los 3.600 puntos en la principal referencia europea, que era el soporte que señalamos que no podía ser perdido de ninguna de las maneras si queríamos confiar en un contexto alcista de cara a los próximos meses.