En una semana en la que Europa sigue en el ojo del huracán y comienza la temporada de resultados en EEUU no queremos olvidarnos de la bolsa china, que está a un paso de soportes fundamentales como son los mínimos del año pasado.
En efecto, tal y como puede verse en el adjunto, el Índice Compuesto de Shanghai (SSEC) se encuentra a un paso de los mínimos de julio del año pasado en los 2.320 puntos, que son el origen del último gran movimiento alcista en el índice chino. El alcance de este soporte, que es un punto de giro potencial muy importante, debe ser vigilado con atención puesto que desde el mismo la bolsa china podría tratar de, cuando menos, formar un rebote en condiciones.
Por el momento no observamos evidencias técnicas que apunten hacia un rebote pero lo normal en estos casos es que el (SSEC) no solamente alcance el soporte clave de los 2.320 puntos, sino que llegue a perderlo para luego formar un giro alcista. Si eso ocurre estaríamos delante de una oportunidad para tomar posiciones agresivas en China en busca de aprovechar un previsible rebote. Ahora bien, como a cierre semanal el (SSEC) pierda soportes de 2.320 puntos y finalmente no se formara esta hipótesis de reversa, agárrense porque podrían venir curvas y el índice chino podría proseguir su tendencia bajista hasta la base del gran movimiento canalizado, que actualmente aparece por los 2.000 / 2.100 puntos, lo que daría margen de caída adicional de un 10/15%. En este entorno volveríamos a vigilar atentamente la bolsa china.