A finales de octubre del año pasado, Enagás tuvo un encontronazo con el mercado. Rebajó su plan de inversiones de 900 a 700 millones de euros anuales. Como sus beneficios están totalmente ligados a las inversiones que pone en marcha, aquello provocó que muchas firmas de inversión recortaran tanto las expectativas de ganancias, como sus valoraciones. Hoy, con su nuevo plan estratégico, que califica, además "de conservador" podría comenzar a quitarse ese lastre.
No es que haya habido sorpresas de calado, pero sí algunas pinceladas más positivas de lo esperado..