La volatilidad que sufre la bolsa española ha dado paso a una gran divergencia en las valoraciones que proporcionan las firmas de inversión de las acciones de las empresas cotizadas. De media, la diferencia entre el precio objetivo más alto y más bajo de la media de acciones del índice es del 80%, lo que anticipa ajustes, que, en las circunstancias actuales podrían ser a la baja. En las que existe menos riesgo de que eso suceda es en Criteria, Ebro e Indra.
La fuerte divergencia entre la valoración más alta y más baja que realizan las firmas de inversión, lo que pone de manifiesto es que las fuertes correcciones han dejado muchas valoraciones desactualizadas, probablemente, además, del lado más alto. Éso y que existe poca unanimidad sobre la valoración real de las empresas españolas. Menos en aquellas en las que los analistas tienen mucha visibilidad sobre su precio objetivo a 12 meses. Aunque esto no asegura que los expertos no vayan a efectuar variaciones negativas, lo normal es que sean más proclives a eludir fuertes recortes de valoración.
En estos momentos, Criteria es la compañía que ofrece valoraciones más ajustada, ya que entre la más optimista y la más pesimista sólo hay una diferencia del 26%. Venture Finanzas es la firma que revisó más a la baja el precio objetivo de la sociedad al situarlo en los 3,61 euros a mediados de mayo y Banesto Bolsa la más optimista al fijar ayer (1 de junio) un precio de 4,56 euros. Pese a ello, la media de analistas valora los títulos de Criteria en 3,9 euros, lo que supone una mejora del 0,5% con respecto a comienzos de año.
Otra de las compañías que ofrece una mayor visibilidad es Ebro Puleva. En lo que llevamos de año, la diferencia entre el precio objetivo más elevado (18,74 euros asignado por Banesto Bolsa a mediados de mayo) y el más bajo (14,05 euros fijado por Sabadell) es tan sólo del 33%. En lo que llevamos de ejercicio, la media de los expertos han mejorado cerca de un 6% su valoración, que se sitúa a la fecha en 16,7 euros. Además, el grupo de alimentación es el que ostenta la recomendación de compra más clara de todo el indicador.
El caso de Indra es distinto porque aunque es una de las cotizadas del Ibex con la valoración más ajustada -entre el mayor y el menor precio objetivo asignado tan sólo hay una brecha del 38%-, el valor teórico de la media de los expertos retrocedió más de un 2,5% en lo que va de año hasta alcanzar los 17,1 euros. Morgan Stanley fue la firma que lidera las revisiones más a la baja, ya que estableció el mes pasado un precio objetivo de 14,5 euros, frente a los 20 euros que debería alcanzar Indra según Credit Suisse.
Sin embargo, la previsión del precio objetivo no es lo único que se ha resentido en lo que va de ejercicio. Y es que según las estimaciones que baraja FactSet, el tiempo también ha hecho mella en el beneficio esperado para el conjunto del año. Indra comenzó 2010 con unas previsiones de ganancias que superaban 200 millones de euros y ahora esperan cerrar con 197 millones en beneficios.
Otras compañías del índice como Enagás y Red Eléctrica también presentan valoraciones ajustadas ya que entre la valoración más elevada y la menor sólo hay una divergencia de alrededor del 50%. Una brecha que se amplía hasta por encima del 50% en el caso, por ejemplo, de Técnicas Reunidas, Ferrovial y Abertis, que además son unas de las nueve compañías del Ibex 35 que actualmente ostentan la recomendación de compra (ver gráfico).
Entre los blue chips, Telefónica es la compañía que ofrece una valoración más ajustada aunque la diferencia es alta comparada con las anteriores acciones. Y es que mientras que Ahorro Corporación situó en enero el precio objetivo de la teleco en 23,5 euros, a finales de mayo Sanford C. Bernstein la rebajó hasta los 14,5 euros. Pese a este desequilibrio, la valoración de la media de los expertos que siguen al valor consideran que Telefónica tendría que llegar a los 20,22 euros.
La brecha que dejan los vaivenes del mercado es mayor en los dos principales bancos españoles, ya que supera el 80% en el caso de Santander y el 97% si hablamos de la entidad que preside Francisco González. La diferencia de valoración en Iberdrola asciende al 72% y en Repsol al 85%.
Seis compañías del principal índice español son las que tienen todas las 'papeletas' de sufrir en sus propias carnes los ajustes que originará la deseada corrección de los mercados.
Es el caso, por ejemplo, de Gamesa donde la variación entre la valoración más positiva y la más negativa es de casi el 159 por ciento. Y es que mientras que Interdin Bolsa revisó el precio objetivo de la renovable en 22 euros a finales de enero y recomienda comprar, BNP Paribas la valoró en 8,5 euros y recomendó vender a finales de mayo. Las diferencias de valoración de Inditex, Popular, Bankinter, Acciona y Gas Natural también supera el 100 por ciento.