Esta semana el Ibex 35 no gana para disgustos ya que ha perdido dos soportes de corto plazo como eran los 11.215 y este jueves los 11.125 puntos, algo que es de todo menos un signo de fortaleza y que no hace más que reforzar el aviso bajista que tuvo lugar a comienzos de semana cuando la principal referencia francesa, el CAC 40, perdió un soporte crítico que confirmó un claro patrón bajista, tal y como vengo insistiendo durante los últimos días.
En este cierre semanal habrá que ver si el Ibex 35 consigue mantenerse sobre el soporte psicológico de los 11.000 puntos, que además coincide con la directriz alcista que viene guiando las alzas desde el pasado mes de octubre. La pérdida de este soporte abriría la puerta a un contexto más correctivo que consolidativo que podría llevar al selectivo español a buscar la zona de mínimos de abril en los 10.500 puntos, algo que vería como una oportunidad magnífica para volver a comprar bolsa española con una orientación de medio plazo.