Claudia Calish es una de las gestoras de renta fija emergente más reconocidas del mercado gracias a su fondo M&G Emerging Market Bond Fund. Defiende que no le asusta que muchos inversores opten por abandonar estos activos ante la victoria de Trump ya que esas ventas generan oportunidades como la que ya ve en el defenestrado peso mexicano.
¿Por qué hemos visto tanto apetito por la renta fija emergente?
Hay muchas razones. Una es por la percepción de que la calidad crediticia se está estabilizando en los mercados emergentes en muchos países tras unos años de recesión. Si vemos estabilización de sus economías veremos también estabilización de la calidad crediticia. Otra es que los precios de las materias primas, sobre todo en el petróleo, se han estabilizado y la tercera razón obedece a las rentabilidades que dan los bonos gubernamentales que han ido decreciendo en los mercados desarrollados hasta el punto de que en muchos plazos está cotizando en negativo, lo que ha llevado a los inversores a buscar rentabilidades atractivas como las de los emergentes.
¿Qué puede provocar que esas suscripciones masivas se conviertan en reembolsos?
Es una combinación de riesgos políticos a nivel global pero no tanto en emergentes porque se han convertido en una excepción dentro de los riesgos políticos que hay a nivel global ya que en muchos países como Brasil o Argentina se está atendiendo a una normalización política. Otro riesgo es la Fed ya que existe el riesgo de que suba tipos 3 o 4 veces el año que viene y eso no está descontado en el mercado. China también es otro asunto que hay que tener en cuenta ya que el rebalanceo de su economía va a durar muchos años y si esa transición decepciona puede haber problemas.
¿Cómo valora el impacto que la victoria de Donald Trump puede tener en los mercados emergentes?
Tiene muchas implicaciones. De primeras, el impacto es negativo teniendo en cuenta los riesgos potenciales que pueden venir de un aumento del proteccionismo comercial, las medidas anti inmigración, la expansión fiscal y su impacto en la curva de tipos de la deuda de EEUU y las incertidumbres que genera su política exterior. Todos estos riesgos se han visto reflejados en los precios de algunos activos emergentes. Por ejemplo, tras el resultado del 9 de noviembre el peso mejicano se depreció con fuerza por la relación comercial que existe entre México y EEUU y esas ventas se extendieron a muchos bonos emergentes y divisas en los días después de las elecciones. Sin embargo, estas caídas han generado buenas oportunidades en países que no guardan tantos lazos comerciales con EEUU como India y Brasil. Incluso Rusia puede verse favorecida si EEUU empieza a relajar las sanciones financieras que tiene contra el país.
¿Ha hecho algún cambio en la cartera desde entonces?
No hemos realizado cambios significativos en nuestra cartera aunque estamos estudiando aumentar la exposición a los países que menos lazos tiene con EEUU cuyos precios se han visto perjudicados y también estamos mirando activos que se han depreciado considerablemente como es el caso del peso mexicano.
¿Cuáles son los criterios que mira en las emisiones antes de incluirlas en cartera?
Uno de ellos es que den rentabilidades de entre el 4 y 5 por ciento , que veamos que su economía está mejorando en términos fundamentales o por lo menos que haya mostrado un punto de inflexión como nos ha pasado con Pakistán.
¿Deuda pública o la privada?
Realizamos un análisis siempre de arriba a abajo (top down). Si vemos que hay muchas opciones de default optamos por gobiernos. Los corporativos pueden ser más arriesgados pero dan más rentabilidad. Creemos que si el país tiene buenos fundamentales el corporativo puede hacerlo bien. Ahora tenemos el 25 por ciento de la cartera en corporativa y no creo que baje de ese nivel.
¿Qué rentabilidad puede esperar alguien que hoy invierta en renta fija emergente?
En torno al 5 por ciento aunque dependerá del riesgo que cada uno asuma en la cartera . Hoy en días si quieres rentabilidad no hay muchas más opciones que la que ofrece la renta fija emergente pero hay que asegurarse de que se elige bien las emisiones y evitar los casos de default. Está en medio de los dos mundos que hay en bolsa y renta fija.