La divisa japonesa se ha convertido en la más fuerte del último mes entre los cruces más negociados mientras las crisis de Grecia y China arreciaban.
Ni el oro, ni el dólar, ni el T.Note estadounidense, ni siquiera el Bund alemán. Todos los tradicionales activos refugio que tenían los inversores se han venido abajo con el temporal que han vivido los mercados en el último mes. Todos han tenido goteras salvo uno: el yen. La divisa japonesa se ha erigido como el gran refugio para los inversores internacionales.