Los líderes de los principales países europeos se reunen hoy jueves para buscar una solución a la crisis de deuda de los países periféricos. Y sus decisiones no sólo pueden devolver la esperanza al mercado, sino también a los productos que invierten en bonos públicos.
El 21 de julio de 2011 puede ser recordado como el día en el que al fin el Eurogrupo decidió aunar fuerzas con medidas concretas para paliar los efectos de la crisis de deuda que amenaza con hacer entrar en default a Grecia, y con contagiarse a países como Italia. Si hoy los líderes hacen lo que se espera de ellos, habrá un grupo que, en el mercado, se sentirá especialmente aliviado: los partícipes en fondos de bonos gubernamentales de la zona euro.