La incertidumbre que viven los mercados está haciendo mella en la renta variable y está impulsando como mejor activo al oro que experimenta su mejor mes desde enero de 2012.
Un 10,5% se ha revalorizado el oro en febrero, un alza que no experimentaba desde enero de 2012, cuando comenzaban a notarse los efectos de la crisis de deuda de los países periféricos de Europa. Así, el metal precioso cotiza muy cerca de los 1.233 dólares, lo que le hace marcar un máximo de 13 meses.