Mientras el crudo se toma una pequeña pausa -aunque no pierde en la semana- los rumores de incentivos llevan a los metales preciosos a máximos de tres meses.
La semana cierra con un balance positivo para el mercado de las materias primas, y no era para menos, pues mientras reviven las expectativas de un QE3 es normal que materiales como los metales industriales aprovechen las noticias para apuntarse algunas ganancias. También tenemos que considerar que este tipo de rumores en EEUU deprecian al dólar y, por ende,abaratan a este mercado comúnmente cotizado en la misma moneda.
Sin lugar a dudas el zumo de naranja es el gran líder de la semana, pues se aprecia más del 15%, pero no es algo extraño. La temporada de huracanes -que suele afectar mucho al clima en Florida- siempre juega un papel decisivo en la naranja y su cosecha. La tormenta tropical Isaac podría convertirse en huracán durante el fin de semana afectando a las costas del sureste de EEUU. Pero entre las 10 que más ganan de la semana, sí encontramos un patrón que nos da pistas de lo que pueden ser las siguientes semanas, los metales preciosos.
Y es que metales como la plata, el platino, el paladio o el oro alcanzan máximos de tres meses -en el caso del oro máximos de febrero- pues mientras más se devalúa el dólar se vuelven más baratos y se convierten en un refugió de doble función.
Por otro lado, las huelgas mineras en Sudáfrica son las responsables del aumento del precio del platino, y lo que preocupa principalmente fue la matanza a media semana entre mineros y autoridades en el país porque es una señal de que las cosas no encontrarán una solución rápida -y de hacerlo sería frágil-. Mientras las protestas no terminen y la normalidad regrese a la zona, el platino seguirá siendo muy sensible a la situación.
El crudo, por su parte, se mantiene, aunque se ha dado un ligero descanso. El petróleo ha ganado más de un 25% desde el 28 de junio -tanto el Brent como el West Texas- marcado por la tensión en Medio Oriente desde la aplicación de las sanciones a Irán, y ante la especulación de crecimiento económico. De esta forma, cede el liderazgo del mercado de materias primas, pero termina la semana en números verdes.