El crudo, termómetro de las bolsas durante los últimos meses, experimentó ayer una jornada de alta volatilidad, movido por el desacuerdo entre la Organización de Países Exportadores de Petróleo -OPEP- y el nivel de los inventarios de Estados Unidos.
La semana pasada, el precio del oro negro experimentó un rebote del XX% -en el caso del Brent-, animado por la especulación de un principio de acuerdo para recortar la producción. El mercado compró que el pacto que se cerró el martes entre Rusia y Arabia Saudí -además de otros productores de la OPEP- para mantener la oferta en los niveles de enero, era un primer paso que podría terminar en un recorte real de la extracción.