El crudo se mantiene al margen de lo que Bernanke pueda decir, y mientras tanto, el oro y la plata aprovechan el momento para perfilarse como el refugio por excelencia.
Entre expectativas, datos, tensión geopolítica y especulación, el crudo se ha apreciado más de un 22% desde el 28 de junio, aunque encontró un respiro estas últimas dos jornadas a la espera de que se formalice una decisión en cuanto a la posibilidad de un QE3. Así, el petróleo suma su segunda jornada de descanso, dejándose este lunes un punto porcentual -tanto el West Texas como el Brent-.
Y es que hablar de un 'Quantitative Easing' no pasa desapercibido para las materias primas. El primer QE entró en 2008, mientras que el segundo fue en noviembre de 2010 propulsando un rally de seis meses que llevó al petróleo americano -West Texas- hasta casi alcanzar los 115 dólares por barril. Sin embargo, ya más de una vez los rumores han terminado en sólo eso, rumores.
Por otro lado, los metales preciosos se aprecian, mientras uno de los principales efectos inmediatos de un incentivo económico se están empezando a dar por descontado desde mucho antes, traduciéndose en una depreciación del dólar, por lo que los inversores recurren a metales como el oro o la plata en busca de mayor estabilidad. Y es que la clave para aprovechar el posible QE3 puede estar en las materias primas.
Tanto el oro como la plata alcanzaron hoy máximos que desconocían desde el mes de abril de 2012. La plata alcanzó los 31 dólares por onza, mientras que el oro llegó a los 1.670 billetes verdes por onza.
Si un incentivo de esa naturaleza entrara en la economía americana, las posibilidades de que las previsiones de crecimiento aumentasen serían importantes, y por ello los metales industriales serían un lugar adecuado para aprovechar un escenario de esta naturaleza. Los estrategas de Ecotrader encuentran que esta opción también tiene fundamentos técnicos por lo que a partir de este lunes, sumamos a nuestra cartera al principal ETF de metales industriales (el DBB) y con la esperanza de mantener un dólar depreciado. Carlos Doblado -analista de Ágora A.F.- comenta "Es obvio, que este es uno de los modos en que se juega una estrategia que apueste por el debilitamiento del billete verde".