Pese a la sorprendente decisión del Banco Popular de China de incrementar los tipos de interés de corto plazo el pasado viernes, las previsiones sobre la moneda del país siguen apostando por un escenario bajista en los próximos meses y años en su cruce contra el dólar.
El pasado viernes, y con la resaca del Año Nuevo Chino, se cerraba un nuevo capítulo del Banco Popular del país y su interés por controlar la depreciación del yuan así como la salida de capitales del país.